Mi corazón es un anarquista empedernido
que sucumbió al mandato firme
de tus dedos al dibujar en mi espalda
con perfumes de nuestro calor.
Tu alma, una república incontrolada
esperando a mi boca pasar
para esbozar un mundo
tuyo, mio: libertad.
Tan bonito como esperaba :)
ResponderEliminarGracias Maribel¡¡¡¡¡¡ ^^ A ver cuándo me pasas alguno o subes a tu blog :P
Eliminar